El 60% de las mujeres sufren de dolores menstruales. Un porcentaje menor son incapaces de funcionar durante un día o más días cada debido a la intensidad del dolor. En su libro de referencia, «Cuerpo de Mujer, sabiduría de mujer», la ginecóloga holística norteamericana, la Doctora Christine Northrup nos indica que este hecho de que en nuestra cultura la mayoría de las mujeres sufran de dolores menstruales es una indicación muy clara de que algo va mal en nuestra relación con nuestro cuerpo. Hemos perdido mucha conexión con nuestra sabiduría menstrual.
Es importante diferenciar los dolores menstruales del síndrome premenstrual. Hay dos tipos de dismenorrea: la dismenorrea primaria son dolores o espasmos que no están producidos por otra enfermedad orgánica en la pelvis, y la dismenorrea secundaria, que son dolores o espasmos provocados por endometriosis u otra enfermedad pelviana.
Mi experiencia con los dolores menstruales
Empecé a sufrir de dolores menstruales cuando dejé de tomar anticonceptivos. Tomé la píldora anticonceptiva durante más de 10 años, principalmente porque tenía acné cuando era adolescente. Cuando la dejé, empecé a tener fuertes dolores menstruales, a veces cuando me pasaba en el trabajo, tenía que volver a casa, con nauseas y profundo malestar. Necesitaba dormir, reposar y por supuesto tomar un ibuprofeno. A veces llegaba a tomar 6 ibuprofenos cada mes para aliviar los dolores. Cuando decidí que ya bastaba y había algo en mí que tenía que sanar y aceptar, empecé con mi práctica de Kundalini Yoga para aliviar esos dolores. Durante varios meses repetí los ejercicios (en modo de cuarentenas), me trataba también con acupuntura y empecé un trabajo de crecimiento personal relacionado con la sanación de útero de Miranda Gray. La combinación de esas prácticas dio sus frutos y a los pocos meses, mi menstruación no me daba ninguna molestia.

¿Cómo puedo mejorar mi dieta para aliviar los dolores menstruales?
- Es recomendable evitar los alimentos refinados (harinas y azucares refinados) que elevan demasiado rápidamente el nivel de azúcar en la sangre y favorece la producción de sustancias químicas inflamatorias en todo el cuerpo, que son causa de dolor y daño en los tejidos.
- Disminuir el consumo de cereales refinados. El exceso de carbohidratos refinados aumenta los niveles de azúcar e insulina en la sangre, lo que tiene por consecuencia la producción de prostaglandinas y prepara el escenario para dolores menstruales.
- Eliminar los productos lácteos (helados, yogur, requesón), por las hormonas y los antibióticos que consumen las vacas y están presentes en la leche y acaban estimulando el sistema hormonal femenino. Hay estudios que sugieren que la lactosa (azúcar de la leche) podría tener un efecto tóxico en los ovarios. Sin embargo, los productos lácteos ecológicos no tienen los mismos efectos, con lo cual, si quieres consumir lácteos, se recomienda que sean de producción ecológica.
- Consumir principalmente verduras y frutas frescas, ácidos grasos esenciales para producir un equilibrio hormonal y eliminar la inflamación celular.
Más recomendaciones para tu bienestar
- Intenta reducir las fuentes de estrés durante tu menstruación
- No tomes ninguna decisión importante
- Respeta tus ritmos, si necesitas descansar, permítete dormir o simplemente no hacer nada
- Practica yoga o recibe un masaje relajante
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Fuente: Cuerpo de Mujer, sabiduría de mujer – Dra Christine Northrup