Siempre me ha fascinado la mitología. Sin embargo, cuanto más leo sobre los mitos griegos, más me doy cuenta de que son el reflejo de una sociedad patriarcal y misógina. Resumiendo: cada historia, cada mito, es la historia de un dios que se «aprovecha» de una mujer, diosa o mortal. O sea, que violan y las dejan embarazadas, así nacen las siguientes generaciones.
La leyenda de Medusa y de las gorgonas
Medusa era originalmente una hermosa doncella, «la celosa aspiración de muchos pretendientes» y sacerdotisa del templo de Atenea, pero cuando fue violada por el «Señor del Mar», Poseidón, en el mismo templo, la enfurecida diosa transformó el hermoso cabello de la joven en serpientes. Se convirtió en un monstruo femenino, que convertía en piedra a aquellos que la miraban fijamente a los ojos.
Con la ayuda de Atenea, la diosa «virgen», Perseo mató a Medusa acercándose a ella sin mirarla directamente sino observando el reflejo de la gorgona en el escudo para evitar quedar petrificado.
Medusa y el poder femenino
En varias ocasiones, Medusa ha sido interpretada en realidad como la Representación del Poder y Sabiduría femenina. Las serpientes, animales condenados por religiones y culturas, eran antiguamente veneradas. La serpiente antiguamente era la representación de la iluminación, de la sabiduría, del conocimiento, del ascenso de nuestra energía kundalini, conocimiento que hoy se condenó asimilando este animal al demonio.
La primera traición de género
Medusa, al ser decapitada por el «héroe» Perseo, quien fue ayudado por Atenea, narra la historia de una de las primeras «traiciones al género». Después de la violación de Medusa por Poseidón, Atenea, la «virginal» se puso celosa, y es por esto que Atenea ayuda a Perseo a conseguir su cabeza. Atenea actúa mano a mano con Perseo y se convierte en aliada del patriarcado, traicionando al género femenino.
Rendir justicia ahora
Me ha impactado y emocionado la escultura del artista de porteño, Luciano Garbati, con su estatua de la Medusa con la cabeza de Perseo como un acto de justicia (la foto del principio del artículo). Garbati pasó su infancia en Italia y se asombraba de la escultura de Cellini (Perseo con cabeza de Medusa) en Florencia, ¿Cómo podía ser que la escultura celebrara a Perseo teniendo la cabeza de la mujer a la que había violado y raptado?
Una vez más se plantea con normalidad el arte que muestra la victoria lograda a través de la guerra y la violación.
Para rendir justicia a Medusa y a todas las mujeres, Garbati quiso rendir homenaje a la gorgona. Con esta estatua invierte los roles, y Medusa expone la cabeza de Perseo, como acto de defensa propia, un acto simbólico para devolverse la dignidad.
Con este acto artístico, se denuncia el poder del patriarcado y de la negación del poder femenino.
Y si queremos recordar en que ocasiones se ha utilizado el mito de Perseo y Medusa, con esta foto, creo que no hace falta explicar mucho. Habla sola…
Fuente: Wikipedia y Foto/escultura de Luciano Garbati
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